El último informe de PwC, Global Consumer Insights Survey 2020, trata de analizar el nuevo escenario al que se enfrenta la distribución, estudiando la opinión de los consumidores y sus hábitos de consumo en todo el mundo, antes y después de la pandemia. En el estudio de PwC más de 23.000 consumidores participaron en la encuesta, se trata de consumidores residentes en grandes ciudades, los núcleos en los que nacen y comienzan a desarrollarse las ideas más innovadoras.
En España, la Covid-19 ha impactado en la renta de los consumidores y en la evolución del gasto, el 61% de los consumidores españoles encuestados ha experimentado una disminución de sus ingresos. A pesar de ello, casi la mitad (47%) ha incrementado sus gastos domésticos, de forma más significativa en los sectores de alimentación (61%), medios y entretenimiento (41%) y electrónica (21%).
“Casi la mitad de los encuestados (47%) ha incrementado sus gastos domésticos”
En cuanto a alimentación, la compra presencial sigue siendo predominante (66%), pero cada vez más consumidores la hacen online (31%). El 70% afirma estar haciendo la compra online con más frecuencia, de los cuales el 88% considera probable seguir haciéndola así cuando termine la pandemia. Respecto a los productos no alimenticios, un 51% de los encuestados compra menos en tienda, un 45% compra más desde el ordenador y un 35% compra más desde su smartphone.
A nivel global los hábitos de consumo están evolucionando de manera muy similar. El 18% ha experimentado una disminución en sus ingresos y un aumento en las facturas del hogar. Los consumidores están enfocándose en aquellas compras más necesarias, reduciendo significativamente su gasto ropa y calzado, viajes y eventos artísticos y culturales. El porcentaje de consumidores que asegura que gastará menos que antes de la pandemia se ha casi duplicado.
“Los consumidores están enfocándose en aquellas compras más necesarias, reduciendo significativamente su gasto ropa y calzado, viajes y eventos artísticos y culturales”
A medida que empresas y consumidores se adaptan a la nueva situación, la transición a un mundo más digital es cada vez más inminente. Las tendencias que estaban transformando los patrones de comportamiento del consumidor de forma progresiva se han acelerado en los últimos meses, y las marcas deben comprender que la COVID-19 ha influido directamente en los hábitos de consumo de los individuos, y reinventarse si quieren seguir siendo competitivas, según indica el estudio de pwc.