“Una política coordinada para mejorar la formación profesional tendría un efecto multiplicador sobre el bienestar social, porque podemos mejorar el acceso al mercado laboral de miles de personas; y sobre la productividad de las empresas, porque es la única vía para solucionar el desajuste de talento de nuestra economía”, recordó la presidenta de ANGED, Matilde García Duarte, en la sesión Un impulso a la formación celebrada en el Senado.
Como señaló el vicepresidente de la Cámara Alta, Javier Maroto, el “hay un desequilibrio entre los jóvenes que salen formados y las necesidades de las empresas”. Por eso en su opinión, “es un deber que cuando formemos a los jóvenes los estemos acondicionando a lo que después existe en el mercado laboral”.
Según datos ofrecidos por la directora de Caixa Bank Dualiza, Paula San Luis, mientras que el “paro juvenil sigue siendo muy alto”, el número de vacantes sin cubrir alcanza su máximo en 10 años, hasta 150.000 puestos de trabajo que no encuentran profesionales con la formación adecuada en sectores como construcción, industria, hostelería o comercio.
«La formación es una prioridad. Desde una perspectiva de Unidad de Mercado, necesitamos una estrategia global de las distintas administraciones con competencias en educación, en la que participen las empresas y los sindicatos y abordar cuestiones como el mejor diseño de los itinerarios profesionales, la adaptación de las prácticas o el apoyo a la formación interna”, insistió Matilde García Duarte.
Paula Somalo, senadora del Grupo socialista, explicó que el 42% de los titulados en FP encuentran empleo en menos de un año, llegando al 70% en algunas ramas. En su opinión, al igual que países como “Alemania o Países Bajos llevan décadas con la formación profesional como eje de su desarrollo industrial y tecnológico”, en España hay que seguir esa senda potenciando la FP dual, apostando por sectores estratégicos, perfiles tecnológicos y mejorando la accesibilidad.
Por su parte, la senadora del Grupo Popular Cristina Díaz abogó por aproximar más la FP a las empresas e impulsar incentivos fiscales y bonificaciones para que puedan colaborar más con la formación dual, porque supone una “inversión de dinero, esfuerzo y tiempo muy importante”.
Como salir de la trampa del talento
La economista jefe de ANGED, Yolanda Fernández, destacó esta “trampa del talento” que se da en nuestro mercado laboral. Comparativamente, España cuenta con un número superior de jóvenes con carreras universitarias y doctorados (20% vs. 14% de media en la UE). Son 770.000 jóvenes con elevada cualificación para los que, sin embargo, nuestro mercado por su estructura productiva y atomización empresarial no es capaz de generar suficientes puestos de trabajo.
Pero si nos vamos a la formación profesional, la fotografía es inversa: en FP y bachiller estamos más de 10 puntos por debajo de la UE y si nos centramos en FP de grado medio solo contamos en el 10% de jóvenes, mientras que la media europea es del UE 35,3%. Es precisamente en ese segmento donde las empresas tienen más dificultades para encontrar perfiles cualificados.
La directora de CaixaBank Dualiza recordó que el 65% de los puestos de trabajo hoy demandan una formación profesional. Es una opción educativa que mejor favorece la inserción laboral y sobre todo puede ser “más flexible” a la hora de incorporar contenidos y adaptar demandas del mercado.
En concreto, se refirió a la necesidad de incorporar competencia en cuestiones como la digitalización o sostenibilidad, avanzar hacia una formación de “perfiles híbridos” con distintas competencias y ayudar a que muchas personas se puedan reinventar a lo largo de su carrera, ofreciendo oportunidades de upskilling y reskilling. Este tipo de formación también es clave para que la necesaria incorporación al mercado laboral de personas extranjeras con las competencias que necesitan las empresas, según Paula San Luis.
“En el pasado, la FP era el patito feo de la educación, pero es todo lo contrario: la empleabilidad en FP está muy demostrada”, explicó Guadapule Bragado, director adjunta de CEU FP España. Hoy son “más de un millón los estudiantes de formación profesional en España, pero la realidad es que todavía estamos lejos de los niveles de OCDE”, según Bragado, que recuerda el éxito de modalidades como la FP más universidad “para aquellos estudiantes que quieren empezar por unas enseñanzas más prácticas y continuar con la universidad”.
Una visión desde la restauración
Durante la sesión de habló recurrentemente de la importancia de hacer más atractivas determinadas profesiones para jóvenes que inician su carrera o aquellas personas que quieren impulsar un cambio en su vida laboral.
Como explicó Pepa Muñoz, chef y propietaria del restaurante El Quenco de Pepa, en el ámbito de la gastronomía se está trabajando intensamente para que los profesionales se impliquen en con las escuelas de formación, por dos motivos: porque es atractivo para la gente joven y porque es necesario formar en nuevas habilidades a los profesores de estas escuelas.
“A los colegios también tienen que ir los profesionales para que los jóvenes aprendan del sector”, continuó Pepa Muñoz, que apuesta además por “involucrar a los proveedores en la formación de los equipos” y trabajar en las sinergias entre sectores: “No concibo la gastronomía sin el comercio y a la inversa”.
Para Pepa Muñoz, “la mejor inversión que puede hacer un empresario es en su equipo”. Ahora bien, ve imprescindible que desde las Administraciones se favorezca la flexibilidad, en cuestiones como la jornada laboral, para que los negocios puedan crecer y adaptarse a las circunstancias de su mercado, que en el caso de la hostelería no son iguales en Madrid que en Toledo o Ávila.
En esta demanda de flexibilidad en la gestión y la adaptación de la normativa coincidió Adriana Bonezzi, directora general de Marcas de Resturación, que agrupa a 170 firmas y 160.000 personas.
En su opinión, el reto de atraer y fidelizar el talento se puede solucionar con los planes de carrera: “Para que alguien que comienza un día friendo pollo en un restaurante, pueda llegar a ser gerente y más tarde a un puesto de dirección corporativa”. Como recordó Bonezzi, en empresas como las de restauración “hay mucha más inversión que un salario en formación” para mejorar habilidades que ayudan transformar las empresas, digitalizar el negocio o la gestión de equipos.
Empleabilidad y casos de éxito en formación
En la sesión del Senado se abordó la empleabilidad y la formación desde la perspectiva de empresas de la distribución.
Celia Cisneros, directora de Talento de Leroy Merlin, explicó que hay una competencia “transversal, que tiene que ver con la diversidad y la inclusión”, que es fundamental abordar desde la formación. En cuanto a competencias más específicas, las mayores demandas se encuentran en áreas como atención al cliente, comercio omnicanal, logística, analítica o cadenas de suministro.
Celia Cisneros explicó las oportunidades que la formación enfocada a los perfiles senior ofrece. En el caso de Leroy Merlin, desde 2022 se han incorporado 650 personas con 50 años o más. Además, se acompaña a las personas que llevan más de 20 años en la empresa de dos modos. Por un lado, se les ofrecen oportunidades formativas de upskilling para que puedan convertirse en formadores internos de la compañía. Por otro, se les acompaña también con planes de formación para que aquellos que lo deseen puedan seguir prestando servicio al cliente desde otras posiciones.
Desde IKEA, su country Talent Manager, Anabel Villada, describió tres focos en los que la formación es clave. En primer lugar, la atención al cliente, es un tipo de grado medio y superior que se necesita tanto para tiendas físicas como contact center. Por otro lado, las áreas formativas de logística, sostenibilidad, ecommerce, automatización.
Un tercer foco especialmente importante para IKEA es la integración de colectivos en dificultades, a través del programa de refugiados skills for employment, que está ayudando a la empleabilidad de personas que vienen de países en conflicto, favoreciendo además su integración lingüística y cultural.
Precisamente la inclusión social es uno de los pilares estratégicos de Sqrups, donde el 75% de su plantilla proviene de grupos en riesgo de exclusión social. “Partimos de la base de que queremos incluir a personas y ofrecer un empleo digno. Lo que hacemos es dar oportunidad proyectada en el tiempo. Ver a la empresa como oportunidad de hacer carrera a largo plazo. Hoy tenemos directores regionales que viene de la Asociación La Rueca”, señala Sergio Raia, director de Recursos Humanos de Sqrups.
Coincidió en la necesidad de impulsar desde la formación las habilidades blandas entre mandos intermedios porque “en un mundo como el retail, que es un negocio de personas para personas, tenemos que partir de la experiencia del empleado en la empresa”.
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