La balanza de la recuperación pende más que nunca del peso de las grandes reformas en marcha y por hacer. El consenso de analistas y organismos coinciden en señalar que España requiere nuevas medidas para impulsar la actividad y consolidar, en el medio plazo, el crecimiento. Y, sin duda, la reforma fiscal será uno de los componentes clave en esa consolidación económica.
A la espera de las conclusiones del grupo de expertos nombrado por el Ministerio de Hacienda para revisar a fondo el conjunto del sistema impositivo español, desde hace meses se bajara la posibilidad de un nuevo aumento del IVA que podría venir por la reclasificación de productos -pasar productos que son gravados al tipo superreducido al reducido; y algunos bienes del tipo reducido al tipo general-.
El Centro de Estudios Económicos Tomillo (CEET) ha realizado una simulación sobre las consecuencias que este tipo de medida tendría en términos de recaudación, empleo y actividad. Éstas son sus conclusiones:
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