La pandemia ha sido el gran test del entorno omnicanal del comercio del que se viene hablando desde hace años. Con las tiendas físicas cerradas y sujetas a fuertes restricciones, el comercio electrónico registró un fuerte dinamismo. Las compras online de productos en España repuntó un 53% en 2020, hasta alcanzar los 15.902 millones de euros, frente una caída de las ventas del total del comercio del 7,9%. Como resultado, la cuota de mercado del e-commerce en España ha crecido hasta el 7,4% en 2020, llegando a alcanzar un peso relativo próximo al 10% en los momentos centrales del confinamiento.
Si sumamos bienes y servicios, el comercio electrónico facturó en España 51.677 millones de euros en 2020, un 5,8% más que el año anterior, según Informe de Comercio Electrónico del IV Trimestre de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) y que contabiliza las compras realizadas por Internet mediante tarjeta de crédito o débito.
En línea con la tendencia de los últimos años, la mayor parte de estas compras (51%) son a empresas situadas en otros países, es decir, son importaciones. Un dato que pone de relieve el nuevo entorno competitivo global en el que hoy opera todo el comercio, independientemente de su tamaño y modelo de negocio.
Fuente de los datos: CNMC