El Banco de España reseñaba hace pocos días que el dinamismo del consumo privado está acelerando la economía. Los últimos indicadores adelantados del comercio, así como el balance del primer semestre refrendan esta tendencia. Entre enero y junio la actividad del comercio creció (en volumen) un 2,7% interanual, mientras que las ventas (en valor) repuntaron un 2,1% interanual, según datos del INE.
Los grandes formatos comerciales subieron ligeramente más que la media (3,2%), debido al dinamismo que desde hace meses se percibe en las categorías de no alimentación, como el textil, la electrónica, cuidado personal, etc. No obstante, el gran consumo también empieza a consolidar un ritmo de crecimiento. En el primer semestre avanzó un 1,3%, según los datos de Nielsen.
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