¿Por qué ocupa España el puesto 69 en la clasificación global de libertad económica? James Roberts, investigador de la Fundación Heritage y co-autor del índice de libertad económica que elabora este think thank de EEUU, visitó España hace unas semanas para abordar los porqués de esta posición. Una de las cuestiones que más destacó y que perjudican a nuestro país en materia de facilidad para los negocios es la sobrerregulación a la que están sometidas las empresas.
Roberts fue más allá e hizo una referencia específica a la falta de unidad de mercado en nuestro país: “La sobrerregulación está asfixiando a las empresas. Es especialmente decepcionante que las comunidades autónomas fraccionen la unidad de mercado. Tampoco es aceptable que año tras año se impongan miles de páginas de nuevas regulaciones. Son sinónimo de complejidad e incertidumbre pare las empresas”.
Como muestra, un cálculo sencillo más que elocuente: Los Parlamentos autonómicos y nacional redactaron sólo en 2016 el equivalente a 700 ejemplares de la última edición conmemorativa del Quijote editada por la RAE. O lo que es lo mismo: casi un millón de páginas (961.291) de nuevas leyes, normas y reglamentos, según datos de la CEOE. Lo que es lo mismo, 14.500 horas de lectura, algo francamente inabarcable para cualquier ciudadano.
Un ejemplo reciente muy ilustrativo del problema de la falta de unidad de mercado es el nuevo impuesto sobre bebidas azucaradas en Cataluña, aprobado este año. Medidas de este tipo incrementan los costes de transacción y generan graves problemas operativos a las empresas, que repercuten también en los consumidores, estableciendo barreras artificiales que frenan el crecimiento. Sirva el caso de un operador en Zaragoza que suministre productos a Aragón y Cataluña, y que tendrá que gestionar dos modelos fiscales distintos para un mercado relativamente pequeño en volumen. De hecho, la cadena agroalimentaria ha solicitado recientemente al Gobierno un recurso de inconstitucionalidad contra este Impuesto a las bebidas azucaradas de Cataluña, por entender que vulnera la libre circulación de mercancías, la unidad de mercado, y el principio de igualdad y no discriminación. Estas declaraciones están en absoluta sintonía con las realizadas por Eurocommerce en referencia más específica al retail. El director de Eurocommerce, Christian Verschueren, considera que el incremento del proteccionismo comercial, que se infiere de esta hiperregulación, “perjudica al comercio”. Además, recuerda que “el mercado único es bueno para el sector y para los consumidores”.
Esta situación se traduce en que, como ya analizamos hace unos meses, la Comisión Europea volvió a colocar el comercio en la lista de reformas pendientes en España. En su último Informe, ya advirtió que “España es uno de los diez Estados miembros que regula el comercio de forma más restrictiva“. La Comisión hace especial hincapié en la labor legislativa de los gobiernos autonómicos, a los que han apercibido en reiteradas ocasiones por el exceso de trabas en materia de comercio, lo que no favorece el crecimiento de las empresas. Así, a nivel nacional las empresas se encuentran con un marco jurídico fragmentado, restrictivo, sujeto a numerosos cambios y conflictos judiciales y, lo que es aún más perjudicial, que resulta anticuado para el contexto digital.
En ANGED hemos sido siempre partidarios de una modernización del entorno normativo, acorde a los cambios que vive la sociedad digital, sencillo, seguro y previsible para todas las empresas que operan en un mismo mercado. Como ya resumió Javier Millán-Astray, director general de ANGED, durante el Retail Forum 2017, “la transformación digital no existe para el legislador”. En cambio, “tenemos un entorno normativo que condiciona la operatividad de la empresa en ámbitos de decisión que pertenecen al propio comerciante. En este sector, una empresa que opera en toda España se rige por más de 300 leyes. Son exactamente las mismas que en 1996, no se ha modificado nada”. La falta de unidad perjudica al comercio, a la economía y a la transformación digital, y el crecimiento de España depende de ello.
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