La violencia sobre las mujeres es una lacra que como sociedad nadie puede tolerar. En lo que va de año, han fallecido 44 mujeres a causa de la violencia de género. Esta cifra es sólo el balance más dramático de una cuestión más profunda, con distintas y variadas vertientes, y que desde las organizaciones empresariales, como parte activa de la sociedad civil, queremos combatir.
Esta misma semana, ANGED y las organizaciones sindicales más representativas en el sector, FETICO, FASGA, CCOO Y UGT mostramos nuestra repulsa y sentido pésame por un nuevo asesinato producido en un centro de trabajo. Los interlocutores sociales queremos expresar sobre todo nuestro compromiso de seguir combatiendo esta lacra por todos los medios a nuestro alcance, mediante el diálogo en el marco de la negociación colectiva y estableciendo medidas de sensibilización, prevención y protección a las víctimas y sus familiares a su cargo.
En los últimos años, varias de nuestras empresas asociadas han entendido que la integración social y laboral de las mujeres víctimas de violencia de género es la mejor forma de ayudar a estas personas a obtener una independencia personal y económica con la que rehacer sus vidas. De hecho, ya son 63 las grandes compañías de todos los sectores que se han adherido a la Red de Empresas por una Sociedad Libre de Violencia de género, que lidera el Ministerio de Presidencia.
Entre otras cuestiones, esta Red no sólo se ocupa de incorporar en igualdad de condiciones a sus plantillas a mujeres que han sido víctimas de violencia, si no también de facilitar otras cuestiones relacionadas con la movilidad geográfica, la prevención en los centros de trabajo, las medidas de sensibilización y formación en la plantilla.
De forma adicional, algunas empresas asociadas colaboran también con la Fundación Integra, una red comprometida con el empleo socialmente responsable, que busca ofrecer segundas oportunidades a distintos colectivos, entre ellos, el de las mujeres que han sufrido daños y maltrato por violencia machista.
La colaboración ciudadana en este ámbito es fundamental y desde la distribución comercial, un sector con amplia mayoría de mujeres, vamos a seguir trabajando para sensibilizar y luchar contra esta lacra social.
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